jueves, marzo 02, 2006

Historias de hospitales, parte 1

Influída por Rulsnake, me he decidido a empezar a incluir en este blog unas cuantas historias de fantasmas en hospitales que conozco por ahí, y de las que tengo una pequeña colección.

Y para empezar, voy a poner la única histora que sé que es totalmente cierta, porque me pasó a mí y tengo testigos. Espero que os guste.

Una noche en que estaba de guardia, salí del puesto de enfermeras a llevarle un medicamento a un paciente, y de camino a la habitación pasé por delante de la puerta de la capilla del hospital. A esa hora (Más o menos las cinco de la mañana) la encontré abierta... eso ya me extrañó, porque normalmente la capilla no se suele abrir hasta las seis. Pero lo que más me extrañó es que delante de la puerta me encontré parado a un niño de como cuatro o cinco años, vestido con un pijama de la clínica, que en cuanto se dio cuenta de mi presencia se metió corriendo en la capilla.
Lo primero que pensé es que era el hijo de un paciente o algo así, así que entré a buscarlo a la capilla, no fuera a romper alguna cosa. Pero por más que lo busqué no lo encontré. Convencida de que debía haber salido de la capilla mientras yo estaba dentro, volví al trabajo sin pensarlo otra vez.
En fin, al cabo de un rato tuve que salir de nuevo a una habitación, y esta vez se vino conmigo una compañera. Volvimos a pasar por delante de la capilla, y el niño estaba otra vez ahí, plantado ante la puerta. Y de nuevo entro en la capilla en cuanto nos vio.
A estas alturas ya me estaba acordando de la madre del niño; volví a entrar a por él a la capilla, y le pedí a mi compañera que se quedara fuera por si lo veía salir, esta vez teníamos que pillarlo. Pero nada. El niño sin aparecer.
Salí cabreadísima de la capilla, volví al control y llamé al vigilante, a ver si entre todos conseguámos dar con el mocoso, y los tres volvimos a la capilla. Imaginaos nuestra sorpresa al encontrarnos la puerta cerrada. Y cuando intentamos abrirla, vimos que la llave estaba echada.
El vigilante jura y perjura que por la noche sólo hay una llave de esa puerta disponible, y que la tiene él. Que esa noche cerró la puerta a medianoche como siempre, y que no volvió a subir a la planta hasta que yo le llamé. Y comprobamos mil veces que la puerta no puede cerrarse con llave desde dentro.
Y sin embargo, yo estuve esa noche dentro de la capilla. Dos veces.
Y las dos veces buscando a un niño que nadie ha vuelto a ver.

4 Comments:

Blogger RulSnake said...

Sencillamente genial... Esas cosas pasan aun con la incredulidad de la gente.

Espectros? "que va!" te dirán.. Eso será algun gracioso, una broma o casualidad de la vida.

Yo no soy cientifico, pero ni ellos han sido capaces de discernir cosas que por mucho q se intenta apaciguar el miedo por medios cientificos no les dieron respuesta.

Y todo eso por el supuesto rigor cientifico y de que "no existen tales sucesos".


Edward carnby, vuelve ><

13:15  
Blogger RulSnake said...

Por cierto, ya te puse en links en mi blog. Aver si pones link tb y añades mas historietas de esas!! yo tendria q recopilar alguna tb..

13:29  
Blogger Sol_Badguy said...

Ya lo había leído en su momento,está bastante bien. ^^

13:43  
Blogger Nikie Blue said...

Prometo ponerte, Rulsnake... en cuanto recuerde cómo se hacía ^^'''''''

Lo curioso es que realmente yo no creo en fantasmas y sucesos similares....siempre intento darle una explicación lógica a este tipo de sucesos. Lo que ocurre es que, después de más de tres años, aún no le he encontrado explicación a éste O_O

22:34  

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